Rita Ora, uno de los cuerpos más tonificados del panorama pop, no lo consigue solo con horas de gimnasio. Su verdadero secreto, según confesó a una conocida revista, es la constancia y la creatividad para mantenerse activa incluso cuando su agenda no se lo pone fácil. ¿Uno de sus trucos más curiosos? Caminar con pesas en los tobillos. Una estrategia sencilla, efectiva y perfecta para quienes no siempre pueden seguir una rutina de entrenamiento formal.
Y es que, a veces, no se trata de encontrar más tiempo, sino de aprovechar mejor el que tenemos.
El truco fitness que puedes copiar de Rita Ora
Entre giras, grabaciones y viajes, la cantante británica sabe que no siempre es posible encajar una sesión completa de gimnasio. Por eso, recurre a pequeños gestos que marcan la diferencia. “Siempre viajo con mancuernas de 1 o 2 kilos, pesas para los tobillos y bandas de resistencia. Si no puedo entrenar, me pongo las pesas en los tobillos y las llevo mientras camino por la ciudad o estoy en casa”, contó Rita.
Una rutina tan simple como inteligente. Caminar con pesas ligeras en los tobillos incrementa la intensidad del movimiento y convierte cualquier paseo cotidiano en una sesión de tonificación suave.
Beneficios de caminar con pesas en los tobillos
Incorporar este hábito en tu día a día puede transformar tu forma física sin necesidad de dedicarle horas al gym. Eso sí, siempre con sentido común y empezando poco a poco.
Tonifica piernas y glúteos
Las pesas añaden una ligera resistencia a cada paso, lo que obliga a los músculos de las piernas, glúteos y caderas a trabajar más. El resultado es una tonificación progresiva y una mejora en la fuerza muscular.
Activa el metabolismo
El esfuerzo extra hace que el cuerpo queme más calorías, incluso durante paseos cortos. Si estás buscando mantener tu peso o aumentar tu gasto energético diario, este es un gesto eficaz.
Mejora la postura y la estabilidad
Caminar con un poco de peso extra obliga a mantener una zancada más controlada y una mejor alineación corporal. Esto fortalece el core (la zona abdominal y lumbar) y mejora el equilibrio.
Estimula la circulación
El movimiento constante con resistencia ligera favorece el retorno venoso, ayudando a reducir la sensación de piernas cansadas o hinchadas. Ideal si pasas mucho tiempo sentada o de pie.
Perfecto para días sin tiempo
Si tu agenda está repleta, caminar con pesas mientras haces recados o trabajas desde casa puede ayudarte a mantenerte activa. No sustituye un entrenamiento completo, pero sí te mantiene en movimiento.
Cómo incorporar las pesas de tobillo a tu rutina
Antes de lanzarte a usarlas, hay algunas recomendaciones básicas para evitar lesiones y aprovechar al máximo sus beneficios.
Comienza con pesas ligeras, de entre 0,5 y 1 kilo por tobillo. Aumentar el peso demasiado rápido puede sobrecargar las articulaciones o modificar tu forma de andar. Úsalas en paseos cortos de entre 15 y 30 minutos, y presta atención a cómo responde tu cuerpo.
También puedes probar a usarlas en casa mientras realizas tareas domésticas o subes escaleras, sin necesidad de modificar tu rutina diaria. Si haces entrenamiento de fuerza o pilates, las pesas de tobillo pueden ser un complemento perfecto para añadir intensidad.
Precauciones y limitaciones
Aunque caminar con pesas en los tobillos tiene muchos beneficios, no es una práctica recomendable para todo el mundo. Si tienes problemas articulares, lesiones de rodilla o cadera, o sufres de sobrecarga muscular, es mejor evitar su uso o consultar primero con un fisioterapeuta o entrenador.
Además, no conviene usarlas durante largas caminatas o al correr, ya que el impacto adicional podría afectar tus articulaciones. La clave está en usarlas con moderación, como un plus de resistencia, no como sustituto de un entrenamiento completo.
El equilibrio perfecto entre movimiento y realismo
La rutina de Rita Ora demuestra que cuidarse no tiene que implicar obsesión ni sacrificios imposibles. Se trata de encontrar pequeños hábitos sostenibles, esos que encajan en tu ritmo de vida y te ayudan a mantenerte activa sin presiones.
Así que la próxima vez que no puedas ir al gimnasio, recuerda su truco: ponte las pesas en los tobillos, sal a caminar y deja que cada paso sume. Porque, al final, moverse, aunque sea un poco, siempre es mejor que no hacerlo.




